Juventud en riesgo: drogas al alcance en fiestas y reuniones

Por Sociedad Educadora 

La problemática del acceso a las drogas entre niñas, niños y jóvenes en México, y específicamente en Sinaloa, es un tema de creciente preocupación. En un contexto donde las fiestas, quince años y reuniones son eventos sociales comunes, es alarmante cómo la presencia de drogas se ha normalizado y está al alcance de los más jóvenes.

A nivel nacional:

Según la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (ENCODAT) 2016-2017, el 17.2% de los adolescentes entre 12 y 17 años han consumido drogas ilegales alguna vez en su vida.

De este grupo, el 10.6% de los adolescentes han probado marihuana, y el 3.3% ha experimentado con inhalantes.

En 2019, la Comisión Nacional contra las Adicciones (CONADIC) reportó que el uso de drogas ilegales entre adolescentes había aumentado en un 20% en los últimos cinco años.

En Sinaloa:

Sinaloa, conocido por ser un epicentro de actividades relacionadas con el narcotráfico, muestra cifras alarmantes. El Diagnóstico de Adicción a las Drogas en Sinaloa 2021, elaborado por Sociedad Educadora, indica que el 25% de quienes reconocieron haber consumido drogas iniciaron cuando tenían entre 10 y 15 años.

La Encuesta de Consumo de Drogas en Estudiantes (ENCODE) de Sinaloa 2021 revela que el 22% de los estudiantes de secundaria y preparatoria han consumido drogas ilegales al menos una vez.

El 15% de estos jóvenes ha admitido haber estado expuesto a drogas en eventos sociales como fiestas y reuniones de quince años.

Contexto social y exposición

Asistir a fiestas es una parte normal del desarrollo social y puede ser una experiencia positiva. Sin embargo, estos entornos también pueden exponer a los jóvenes a presiones para consumir drogas y alcohol, especialmente si carecen de supervisión adecuada o apoyo familiar. La combinación de curiosidad, búsqueda de aceptación social y falta de experiencia puede hacer que los adolescentes sean particularmente vulnerables a estos riesgos. Es crucial promover entornos seguros y educar a las y los jóvenes sobre las consecuencias del consumo de sustancias para ayudarles a tomar decisiones informadas y saludables.

 

¿Por qué los adolescentes acceden tan fácilmente a las drogas?

  • Fácil acceso: La presencia de drogas en eventos sociales es cada vez más evidente. En una encuesta realizada por el Centro de Integración Juvenil Sinaloa, el 40% de los jóvenes reportó que les ofrecieron drogas en una fiesta.
  •  Normalización de la cultura de consumo: En muchas ocasiones, la presencia de drogas en fiestas y reuniones no solo es tolerada sino esperada. Esto crea un entorno donde los adolescentes sienten una presión social para consumir.
  • Falta de vigilancia y supervisión: A menudo, los eventos juveniles carecen de la supervisión adecuada de adultos, lo que facilita la introducción y el consumo de sustancias ilícitas.

 Consecuencias y medidas

El consumo de drogas a edades tempranas tiene consecuencias graves y a largo plazo, que incluyen problemas de salud mental, adicción y una mayor propensión a involucrarse en actividades delictivas. Es fundamental que se tomen medidas para combatir esta problemática:

Educación y prevención: Programas educativos como Momento de Decisión, que informen a los jóvenes sobre los riesgos del consumo de drogas y que promuevan estilos de vida saludables.

Supervisión en eventos: Mayor involucramiento de adultos y medidas de seguridad en eventos sociales para prevenir la introducción de drogas.

Apoyo y rehabilitación: Fortalecimiento de los servicios de apoyo y rehabilitación para adolescentes que ya han sido expuestos a las drogas.

Un call to action para toda la sociedad

La realidad del acceso fácil a las drogas entre niños, niñas y jóvenes en Sinaloa y México es un desafío que requiere la atención y acción de toda la sociedad. Desde la implementación de políticas públicas hasta la educación en el hogar y en las escuelas, es esencial que todos los sectores se involucren para proteger a las futuras generaciones y garantizar que los eventos sociales sean lugares seguros y libres de drogas.